El pádel es un deporte muy actual que en los últimos años ha experimentado un gran crecimiento a nivel mundial. El pádel comparte características con otros muchos deportes de raqueta como el tenis, el frontón y el squash.
Es un deporte fácil de practicar, ya que adquiriendo algunas características básicas en cuanto a los aspectos técnico-tácticos más importantes, observaremos una progresión muy increíble a los pocos meses de práctica.
Los niños que lo juegan y practican reciben muchos beneficios de este, hoy veremos algunos.
- 1) Es un deporte muy accesible y realmente fácil de practicar para los niños.
- 2) Tiene un reglamento sencillo, fácil de aprender y seguir.
- 3) Es muy divertido para los niños, es social y competitivo, lo que estimula la interacción entre los más pequeños.
- 4) No es necesario disponer de una equipación excesivamente compleja de adquirir. Solamente es necesario disponer de los siguientes elementos: pala de padel niño, zapatillas, ropa cómoda, y otros accesorios que son más bien opcionales.
- 5) Les permite trabajar conceptos muy variados en pareja (colaboración, saber competir, capacidad de esfuerzo, trabajo en equipo y superación, así como otros muchos valores).
- 6) Aumento de la fuerza muscular.
- 7) Aumento de la coordinación general y específica.
- 8) Hábito activo en la práctica de actividad física.
- 9) Lucha contra la obesidad y el sedentarismo en la población infantil (aumento considerable en los últimos años).
- 10) Gasto calórico (liberación de endorfinas por causa del ejercicio) y estados anímicos adecuados.
¿A qué edad se puede empezar a jugar al pádel?
Esta es una de las preguntas que más surgen a la hora de querer que los más pequeños del hogar jueguen al pádel, y aunque va a depender de varios factores, podemos decir que a partir de los 4 años podemos comenzar a iniciar a nuestro hijo en el “pre-padel”.