El pádel como todos sabemos tiene numerosos beneficios para la salud, pero no todo puede ser color de rosa y de vez en cuando nos surgen algunos pequeños problemas por practicarlo. Lo más habitual es que surjan contracturas musculares, pero esto tiene fácil solución si usamos un foam roller.
¿Qué es el foam roller?
El foam roller es un implemento que consiste en un rodillo de espuma sobre el que aplicamos nuestro peso corporal para realizar técnicas de liberación miofascial. Al principio existían muy pocos modelos y en pocos tamaños, sin embargo, hoy en día por suerte cada vez vamos teniendo más donde elegir pues es un cilindro, que puede estar hueco o relleno, puede tener formas o ser liso, largo o corto…
Lo importante del roller es que trabaja a nivel muscular en la capa superior, la fascia, pues mediante la presión que ejerce nuestro cuerpo al rodar por encima, el roller trabaja los puntos de tensión muscular y los relaja. Somos nosotros con nuestro propio cuerpo los que decidimos la intensidad de la presión, poniendo más o menos peso, para sentir menor o mayor compresión en la zona.
¿Cómo se usa?
Dependiendo de cada zona del cuerpo lo ideal es que lo hagamos de una manera u otra, aquí tienes unos trucos para hacerlo perfecto:
En los glúteos:
Simplemente pasamos una pierna sobre la otra, giramos el cuerpo levemente hacia la pierna doblada y recargamos todo el peso en ese glúteo. Después rodamos sobre el foam roller, veremos como nuestros glúteos lo agradecen.
En la Tibia:
Nos arrodillamos sobre el roller, colocamos las manos en el suelo y rodamos desde las rodillas hasta los tobillos. Veremos que es una sensación rara, pero a la vez relajante, esto lo podemos hacer todas las veces que queramos.
Pantorillas:
Colocamos el foam roller en el suelo y nos sentamos sobre el con las piernas extendidas. Ponemos el rodillo sobre las rodillas y con la ayuda de nuestros brazos vamos levantando la cadera y rozando hacia delante y hacia atrás.
Aductores:
Tenemos que acostarnos boca abajo, abrimos las piernas en escuadra y colocamos el roller debajo de la parte interna del muslo de tal manera que pueda rodar hasta la rodilla y lo repetimos todas las veces que sea necesario.
Isquiotibiales:
En este caso tenemos que colocar el roller sobre el suelo y nos sentaremos sobre el. Después lo llevaremos a la altura de las rodillas, extendemos las piernas y con a ayuda de los brazos intentaremos rodar hacia delante y hacia atrás.
Cuádriceps:
Para esta zona del cuerpo nos tenemos que poner boca abajo, después ponemos el rodillo entre los muslos y con la ayuda de los brazos haremos rodar el foam roller desde las rodillas hasta las caderas. Podemos usarlo tantas veces y tiempo como queramos hasta que desaparezcan las molestias que tengamos.
Aquí tienes un listado de los mejores rodillos para evitar las contracturas del pádel y disfrutar de sus beneficios. Todos tienen unos precios muy buenos pues ninguno supera los 25€.
